Muchas veces, el camino más difícil es el que va desde nuestro cerebro hasta nuestra boca. Al estudiar idiomas, a menudo nos ocurre que sabemos qué queremos decir y cómo se dice, pero no conseguimos que salga de nuestra boca con facilidad y naturalidad. El mejor remedio para eso es la práctica, y para practicar nada mejor que apuntarse a un taller o a un club de conversación. Si te matriculas en un club de lectura, además de hablar también podrás disfrutar de la buena literatura. Si te interesan lo clubes de conversación, haz click aquí; si, en cambio, te interesan los talleres o los clubes de lectura, haz click aquí. Anímate.
29 de September de 2023