El pasado día 25 de marzo, la EOIP organizó una charla a raíz de una petición de numerosos alumnos del Centro que tenían interés en viajar al extranjero para practicar el idioma que están aprendiendo, hacer cursos, trabajar y en fin, tener una experiencia diferente y agradable en otro país. La charla estuvo a cargo de tres personas expertas en el campo de viajes para estudiantes de idiomas: Miren Azpiazu (Directora de EAS-VELE, San Sebastián) José Antonio Murua (SHE - Herencia, Vitoria) e Igor Crespo (USLAN, Vitoria). La charla se centró en la mayor parte a personas que tienen a partir de los 18 años.

a) La escuela. Es muy importante elegir un centro serio con una buena reputación. Un centro aprobado por el Ministerio de Educación y con un profesorado titulado y cualificado en impartir cursos de la lengua meta como idioma extranjero. En estos centros cada persona que entra hace una prueba de nivel y durante las primeras clases tanto los alumnos como los profesores pueden ver si el nivel es el adecuado. Se intenta llegar a un equilibrio en el computo de estudiantes e idiomas evitando así que haya por ejemplo, de una clase de inglés de 16 alumnos, haya 12 españoles, tres italianos y un sueco. Un buen centro contaría además con un centro de auto aprendizaje donde las personas que lo deseen pueden practicar o trabajar aquellos aspectos que quieren mejorar o reforzar.

b) Es importante saber que los cursos de idiomas no hacen milagros y el éxito del curso depende de muchas cosas; una de ellas es el nivel de partida. Si tienes muy poco nivel todavía podría resultar difícil hacer muchos progresos en un período corto de tiempo. Con una mejor base se puede avanzar más pero, obviamente, al fin y al cabo depende de cada persona y de su madurez, su actitud y de su nivel de motivación.

c) Según los ponentes, un aspecto se valora muy positivamente, a raíz de las encuestas que los alumnos entregan, es el poder conocer diferentes culturas. Las personas que acuden a la escuelas en el extranjero vienen de una gama muy amplia de países: desde Senegal o Arabia Saudí hasta Tailandia o Japón. Con una actitud abierta y positiva puedes llegar a hacer amistades extranjeras tanto en el centro como en los alojamientos. para conocer a los “nativos” se puede hacer a través de la familia con quien estás o si no a través de tus hobbies.

d) Muchas personas pueden preguntar ¿Y qué puedo aprender allí que no puedo aprender aquí? Para otras muchas personas la respuesta está clara. Pero merece la pena insistir en lo siguiente: Si tienes una buena base léxico/gramatical igual no conviene pedir un curso con componte gramatical muy fuerte; sería mejor buscar uno con un enfoque más basado en las destrezas. Estando en el país donde se habla la lengua meta, uno puede “hacer oído” y soltarse en la expresión oral. Además estos giros típicos o expresiones de todos los días se pueden adquirir con mucho menos esfuerzo que en la clase aquí. Otro aspecto importante es que puedes mejorar tu “capacidad de reacción.”

e) El alojamiento normalmente es en familias aunque durante los meses de verano hay posibilidad de alojarse en algunos campus universitarios. Los buenos centros cuentan con una oficina que se encarga del alojamiento con familias y está en contacto con la empresa que desde aquí gestiona la estancia. Una ventaja de pedir una estancia con tiempo es que tienes más opción para que puedan elegir una familia que pueda encajar dentro de tus preferencias. Para aprovechar la estancia y disfrutarla, es imprescindible comunicar a la organización, al centro o a la misma familia cualquier problema que tengas. Por ejemplo, si eres vegetariano estricto, si eres celiaco o diabético, si tienes alergia, si estás tomando medicación, si tienes miedo a los perros, gatos etc. Además si tienes algún problema con la familia, coméntalo con el centro para poder solucionarlo.

f) A la hora de elegir el destino del curso elegido quizá en cuanto al país no hay mucha opción pero es importante la ciudad. Será mejor informarte y así puedes elegir un sitio según tus gustos y tus preferencias para aprovechar la práctica del idioma. En Europa, quitando las ciudades capitales como París, la estructura de las ciudades es muy similar. Hay muchas casas unifamiliares y la mayoría de la gente vive en barrios, no en el centro.

g) En algunos casos, como él del inglés, hay mucha oferta de cursos y es aconsejable saber definir tus necesidades a la hora de elegir un curso.

¿Quieres un curso de idioma con fines específicos, p.ej. empresarial, derecho, medicina etc? ¿Quieres un curso de idioma en general en un grupo? ¿Prefieres clases en grupos reducidos? ¿Quieres un curso “combinado” (que puede consistir en 3 horas de idioma en general y 2 horas 1- to- 1 para poder trabajar ciertos aspectos en más profundidad.) 1-to-1 quiere decir “clases particulares.” ¿Quieres hacer un curso estándar (de 15 horas lectivas a la semana o uno intensivo (21 a 30 horas lectivas a la semana)? En los centro aparte de las clases hay una amplia gama de actividades complementarias tales como excursiones, teatro, cine, etc. Estas son decisiones que deberías tomar antes de pedir un curso. Le conviene a todo alumno informarse bien sobre esto. Hay otra opción en varios lugares y ésta es “inmersión.” Si no quieres estar en un grupo con otros castellano o vasco parlantes puedes recibir clases en la casa de un/a profesor/a. Aquí se podría hacer un curso “a medida.” El alumno hace la misma vida que la familia pero recibe clases a la vez. Está claro que se pierde el contacto con un grupo más numeroso de gente variada pero quizá a la larga se aproveche más el tiempo. En algunos casos, por ejemplo en el caso de gente joven de 17/18 años, compartes la experiencia con otro estudiante de un país diferente al tuyo. Así que tienes con quien practicar a parte de la familia.