BECAS.
.2009

 

Texto: Mercedes Ederra
Mi experiencia en Roma

 

 

 

 

 

Me llamo Mercedes Ederra y soy estudiante de 5º curso de Italiano en la E.O.I.P. El año pasado me pareció que había llegado el momento de poner en práctica todo lo que había aprendido ya y lo que todavía era más importante, hacerlo yo sola. Así que me fui a Roma la primera quincena de mayo. Me había matriculado en una escuela llamada "Torre di Babele" y su secretaria se encargó de buscarme alojamiento. Me dieron a elegir varias opciones y decidí alojarme en casa de una señora muy amable, en habitación individual con derecho a cocina. Quería que mi estancia en Roma fuese lo más parecido a la vida cotidiana de cualquier mujer italiana, es decir, trabajar (en mi caso asistir a clase), hacer la compra por mi misma, pasear, visitar museos, exposiciones etc.
La primera impresión que tuve al llegar a la escuela fue muy agradable. Me sentía como en casa. Una profesora me recibió y me hizo un test y unos minutos de conversación para ponerme en el grupo con el nivel adecuado. Estábamos nueve personas en mi grupo y la verdad es que nos entendíamos bastante bien. Eso sí, siempre en italiano, ya que todos éramos de distinta nacionalidad (alemana, inglesa, francesa, africana......). Entre nosotros había dos sacerdotes, una cantante de ópera, un entrenador de fútbol, una ama de casa, una química y varios estudiantes. También teníamos unas edades bastantes diferentes, con lo cual, se puede decir que el único nexo de unión que había entre nosotros era el idioma. Y esto es muy bueno, por lo menos a mí me hacía esforzarme mucho.

En cuanto a los métodos de enseñanza, tengo que decir que no he visto nada nuevo en relación con lo que hacemos aquí, en nuestra escuela. Trabajar en grupo, escuchar canciones, ver videos, redacciones, conversación etc. Si acaso, darme cuenta que aquí tenemos muy buenas instalaciones y profesorado. Teníamos también una sala de ordenadores con conexión a Internet a disposición de los alumnos, lo cual
me vino muy bien para comunicarme con mi familia.

Las clases eran en horario matinal, de nueve a una. Por la tarde, algunos días se realizaban actividades extraescolares, como la visita al Coliseo y otros monumentos famosos, siempre acompañados por una profesora guía que nos contaba esa clase de cosas que los turistas que van a Roma no escuchan nunca. Por ejemplo conocimos la "Garbatella" que es un barrio romano muy diferente a lo que estamos acostumbrados a ver. Nació en 1920 cuando Mussolini decidió sacar a la luz todas las ruinas del centro de Roma para enseñarlas a los grandes mandatarios europeos. Enton- ces la gente que vivía en el centro de Roma fue sacada de sus casas, que a su vez fueron derruidas y llevadas a vivir a este barrio que había sido edificado para ellos.

Otra visita obligada en Roma es la Ciudad del Vaticano. Mi primera visión de la Plaza de San Pedro fue de noche, con todas sus estatuas iluminadas, y la imponente basílica ante mí. Lo cierto es que me impresionó sobremanera. Podríamos continuar hablando de las maravillas de la ciudad eterna pero no tendría suficiente con cien folios...

En cuanto a mis paseos por la ciudad, tuve la oportunidad de charlar con muchas personas diferentes, asistir a una preciosa exposición de Marc Chagall, a un concierto del coro Sto. Thomas More de EEUU en gira por Europa y a conocer infinidad de calles, plazas, fuentes, etc. ya que cuando se viaja sola se va más rápido y se aprovecha mejor el tiempo.

También es cierto que a veces te sientes un poco sola por el hecho de no poder compartir con nadie todo lo que estás viendo y disfrutando. Sin embargo para mí ha sido una experiencia estupenda, que no solo hace mejorar el idioma que estás aprendiendo, sino que abre la mente para ver algunas cosas de diferente manera y sobre todo darme cuenta que soy capaz de desenvolverme por mi misma en otro país. Ha sido muy gratificante y se lo recomiendo a todos mis compañeros.

 

Texto: Beatriz Barber Zugaldía, français de la EOIP
Je suis allée à Montpellier
Cet été, je suis allée à Montpellier pour faire un cours de français pendant deux semaines en France et, en même temps, profiter du soleil, de la mer, connaître d’autres personnes de différents pays et, bien sûr, la culture française.
Je vais vous raconter mon expérience afin de vous encourager à étudier une langue à l’étranger. C’est une expérience très recommandable.
Au début de l’année je voulais partir quelques jours en France et quand j'ai su que la EOIP offrait un concours de bourses, je me suis présentée. En mars j’ai reçu la bourse.
Après, j’ai cherché par Internet des cours en France mais, en mai j’ai lu dans les journaux que le «Departamento de Deporte y Juventud de Gobierno de Navarra» avait fait un Guide de Cours de Langues à l’étranger. Cela m'inspirait plus confiance que le cours que j’avais trouvé par Internet. Alors, je me suis inscrite pour aller à Montpellier.

J’ai choisi un cours de 20 leçons hebdomadaires. Chaque leçon était de 45 minutes et, alors, du lundi au vendredi nous avons eu cours de 9 à 12 heures. Aussi, il y avait la possibilité d’un cours de 30 leçons hebdomadaires avec des cours le matin et l’après-midi. L’école pouvait nous chercher un logement et j’ai choisi d'habiter chez une famille avec l’option de demi-pension (petit-déjeuner et dîner). Avec ma famille il y avait aussi d'autres étudiants d’une autre école (deux filles de Suisse et un garçon d’Autriche).
Le premier jour nous avons dû faire une petite épreuve pour que l’école puisse nous classer par niveaux.
Dès les premières minutes j’ai rencontré beaucoup d’étudiants et, comme nous étions tous arrivés seuls, nous avons fait un groupe très nombreux et sympa. Nous avons mangé tous les jours ensemble, et après nous avons visité la ville, nous sommes allés à la plage et nous avons visité des endroits…
Dans ma classe nous étions douze étudiants (4 autrichiens, 1 hollandais, 2 anglaises, 3 espagnoles, 1 mexicaine -qui habitait aux Etats-Unis- et 1 polonaise). Pendant les cours nous avons fait de la grammaire, du vocabulaire, des expressions et aussi des débats pour connaître les différentes réalités de nos pays. C'était très intéressant.

Samedi, nous avons visité Avignon et Arles. Et dimanche nous sommes allés à Narbonne et Carcassonne avec une excursion organisée par l’école. Carcassonne est une ville magnifique avec un château cerné par une double muraille et une cité médiévale à l’intérieur.
Montpellier est une ville de 250.000 habitants où la plupart sont des jeunes. Il y avait des concerts et des spectacles partout. Nous nous sommes bien amusés.


VALORACIÓN PERSONAL DEL CURSO

Ha sido una buena experiencia, recomendable para aprender idiomas a la vez que disfrutas de unas vacaciones.
En primer lugar, en muy poco tiempo he mejorado mi nivel de francés. Aunque sólo he estado dos semanas, he notado que mi soltura al hablar ha aumentado. Tanto los profesores como las familias son franceses, así que es más fácil coger un buen acento de francés.

· En segundo lugar, la mejor manera para conocer la cultura francesa es vivir en Francia con nativos. He podido conocer nuevas ciudades, costumbres, gastronomía…

· Además, he tenido la posibilidad de conocer personas de muchos otros países. La mayoría de las personas que van a estos cursos van sin conocer a nadie, así que es muy fácil desde el primer momento hacer grupos de amigos.

 

Text by Edurne Zelaia Tirapu
Welcome to London
When I got the grant of EOIP to learn English abroad a few months ago, I didn’t know where to go. I was looking forward to either going to England or to Ireland. Finally, I went to England, and the chosen English city was its amazing capital, London.
I had lived there for a few months last year and honestly, I fell in love with that marvelous city. Moreover, I wanted to take just a monthly English course, so that is why I found it easier to go to a well-known place to me.

Of course, London did not let me down. It was as incredibly astonishing as I remembered. Once San Fermín was over, I packed my suitcases heading for the capital of England. The city itself keeps all its wonderful splendor as it has countless stunning and imperial building and places which contrast with strikingly modern skyscrapers and skylines. That is one of the aspects I like most about London. However this is not the only city’s attraction.
As a such a touristic city, London offers visitors a huge range of free and outstanding museums, such as British Museum or National Gallery; places of interest (Big Ben and Houses of Parliament, Westminster Abbey, Piccadilly Circus, etc.), street markets packed of odd and alternative stalls like Camden Market, Portobello or Brick Lane, vast parks in the middle of the city such as Hyde Park, Regent’s Park, Richmond, Greenwich; multicultural restaurants, any kind of pubs and clubs…
The most touristic places are not what I like most about London, though.

I love the multicultural character of this peculiar city. You can meet people from all over the world. There are whole areas in London where people from Jamaica, India, Pakistan, Somalia, Poland, Turkey and so on live and run their own businesses, such as pubs, restaurants, shops, stalls, temples… and that is why you are exposed to so many different accents.
As far as the English Course is concerned, I took a monthly General English course. The academy was set in the city centre. I was lucky there was just one Spanish student attending to the same class so I did speak English with my classmates, who came from Brazil, Japan, Korea, Turkey, Vietnam, Italy, France, etc.
Besides I was pleased when I found out I had different teachers from diverse English-speaking countries. I had a New Zealander or Kiwi teacher, one Londoner and another Londoner whose parents came from India. This fact let me improve my understanding of different accents, what it is crucial in a city as cosmopolitan as London is.
The first lessons were based on grammar, vocabulary, phrasal verbs and all that kind of stuff. But from the second week on, the teacher started teaching us spoken and colloquial expressions, slang words to get us updated with the real English. We even pretended to be Londoners or British people, following their pronunciation patterns. It was quite funny!
To sum up, I think everyone should visit London at least once in their life. It is really worth it.

 

Text by Maitane Ansa Arizcuren
Four weeks in England
El 28 de febrero de 2008 la EOIP me otorgó una beca de 600 _ para realizar un curso de inglés en un país de habla inglesa con el objetivo de mejorar el idioma que cursaba en la EOIP.
Debido a la cercanía física fue el Reino Unido el país que elegí para llevar a cabo el curso y al conocer la ciudad por una estancia anterior fue la academia londinense Academy International la que seleccioné.
Academy International es una academia de tamaño medio situada en Bayswater, Londres, en la que se han impartido clases desde 1964. Dentro de la gran oferta académica de Londres, esta academia entraba dentro del presupuesto económico y permitía, a diferencia de otras, llevar a cabo cursos intensivos de 25 horas semanales, lo cual posibilita un mayor aprovechamiento de la estancia en el extranjero.

El curso intensivo de 25 se dividía en dos clases: la primera, de 9 a.m. a 12 a.m. estaba centrada principalmente en trabajar la gramática y el vocabulario. Y la segunda, de 12.30 a 15.00 p.m., donde se trabajaba la expresión oral y la fluidez.

En la clase matinal el trabajo se llevaba a cabo por dos técnicas diferentes. En ocasiones, la profesora Imogen Smith nos entregaba hojas de ejercicios gramaticales concretos para repasar o trabajar aspectos concretos de la gramática inglesa. Estos ejercicios no se limitaban a conocer el uso de tiempos, preposiciones, sintaxis… En ocasiones a través de ellos se intentaba también introducir a los alumnos a la realidad social inglesa.
Con este segundo objetivo, en las clases matinales también se promovía diariamente la lectura de periódicos y revistas que para lograr un mayor vocabulario y conocimiento de la ciudad en la que nos encontramos. Debido a la importancia que la profesora Imogen le daba a la literatura como medio de conocimiento de un idioma y una sociedad, también se leían y comentaban en clase extractos de libros u obras de teatro de destacados autores ingleses como Conan Doyle, Oscar Wilde, Shakespeare, Jane Austen como: "The Picture of Dorian Grey", "The importance of being Earnest","The Merry Wives of Windsor"….
En las clases orales la profesora Suzzane Ossa-Richarson promovía diferentes temas de conversación con el objetivo de que los alumnos interactuaran y mejorasen su fluidez y comprensión del inglés.
El curso tuvo una duración de 4 semanas, lo cual me ha permitido mejorar notablemente el nivel de inglés con el que comencé el curso. Personalmente considero que las clases matinales eran de una utilidad muy importante porque me ha permitido ampliar considerablemente mi vocabulario algo que he considerado muy positivo teniendo en cuenta que era uno de los puntos flacos que tenía. El aprendizaje del vocabulario dentro de un contexto literario permite recordar en momentos posteriores más fácilmente el vocabulario aprendido ya que relacionas la palabra con un contexto o situación concreta.
Respecto a las clases orales aunque fueron de gran utilidad considero, y así lo puse en conocimiento de la profesora, que debían haber tenido un contenido teórico o de materia mayor ya que al estar en un país de habla inglesa es fácil trabajar tu expresión oral sin necesidad de realizarlo en la academia. Concreta- mente en mi caso, que me aloje en un albergue juvenil, la posibilidad de hablar con australianos o americanos 24 horas al día me permitía trabajar mi expresión oral sin necesidad de pagar por ello.

Por todo ello de manera general valoro muy positivamente el haber tenido la posibilidad de hacer este curso en el extranjero ya que permite una inmersión total en el idioma, facilitando así el aprendizaje de la lengua. Creo así mismo que es importante señalar que así como el aprendizaje "técnico" de la lengua es esencial realizarla en una academia no considero necesario que la practica oral de la lengua se trabaje en la misma ya que como ya he comentado al encontrarte en un país de habla inglesa esa posibilidad existe en el día a día.